“Eat food. Not too much. Mostly plants.”
Es una conocida máxima de Michael Pollan que simplifica las directrices para una alimentación saludable. Su simplicidad es precisamente lo que la hace tan poderosa.
Desde que la leí por primera vez me quedó inmediatamente grabada, y me inspiró a construir mi propio listado de principios que permitiesen guiar mi forma de vivir con equilibrio.
¿Alguna vez te has sentido abrumado por la complejidad de los consejos de bienestar?
Estas 21 directrices me han servido y espero que sean de utilidad para ti también. De vez en cuando los leo para ver cómo voy y qué aspectos podría trabajar.
- Come. No demasiado. Principalmente plantas.
- Ejercítate regularmente. No sufras. Trabaja todo el cuerpo.
- Duerme suficiente. No subestimes. Recárgate al máximo.
- Medita a diario. No te distraigas. Encuentra tu paz.
- Aprende diariamente. Nunca te conformes. Explora puntos de vista.
- Lee libros. No de un solo género. Elige bien.
- Sueña en grande. No te rindas. Disfruta el camino.
- Toma riesgos. Nunca impulsivamente. Aprende de los fracasos.
- Escribe regularmente. No solo por obligación. Exprésate.
- Sé paciente. No te precipites. Valora el proceso.
- Ama profundamente. Sin miedo. Entrégate.
- Escucha más. Habla menos. Interésate genuinamente.
- Habla con la verdad. No dañes. Sé amable.
- Respeta a todos. No juzgues. Entiende primero.
- Pide ayuda. No sufras solo. Aprende a recibir.
- Enseña a otros. Resérvate poco. Comparte lo que sabes.
- Ahorra. Evita deudas. Invierte en tu futuro y diversifica.
- Cuida el planeta. No desperdicies. Recicla.
- Viaja a menudo. No solo turistees. Sumérgete dónde vayas.
- Ríe más. No a expensas de otros. Aporta alegría.
- Agradece. No solo en buenos tiempos. Todos los días.
Estas directrices me recuerdan lo que importa, me ayudan a exigirme y a evitar excederme más allá de lo suficiente. En un mundo lleno de ruido y distracciones, enfocarnos en lo esencial facilita el camino.
Espero que sean útiles para ti también y las puedas acarrear contigo. Adapta o adopta de a una a la vez y seguro verás cambios muy positivos.
Y tú, ¿tienes algunas máximas que te guíen en tu vida diaria?